Santo Domingo.– Amplios sectores de la sociedad han manifestado su preocupación por la inversión de más de 15 mil millones de pesos anuales que realiza el Gobierno dominicano en la atención médica de parturientas extranjeras, principalmente haitianas en condición migratoria irregular.

La información ha generado un amplio debate público, en momentos en que el sistema de salud enfrenta múltiples desafíos internos. Mientras algunos sectores cuestionan el gasto por considerarlo insostenible y una carga para el presupuesto nacional, otros defienden la medida por razones humanitarias y de salud pública.

En ese contexto, también se ha valorado el plan de control migratorio implementado por el Gobierno, el cual busca establecer límites más claros en la atención sanitaria a extranjeros indocumentados sin vulnerar los derechos fundamentales.