Una intensa tormenta invernal ha sumido al sur de Estados Unidos en caos, con temperaturas polares, fuertes vientos y nevadas que han paralizado diversas zonas y dejado una estela de tragedias.
En Missouri, un empleado de obras públicas de 61 años perdió la vida mientras removía nieve, según informaron las autoridades. Además, en las últimas horas se han registrado 436 accidentes de tránsito, dejando 38 heridos y 1,788 vehículos varados. En otros estados, el hielo en las carreteras cobró la vida de cinco personas en distintos incidentes vehiculares.
El sistema de transporte aéreo también ha sido severamente afectado, con 7,216 vuelos retrasados y 2,678 cancelaciones reportadas este lunes. Mientras tanto, más de 220,000 hogares en estados como Virginia, West Virginia, Kentucky, Indiana e Illinois permanecen sin electricidad debido a las inclemencias del tiempo.
Las autoridades han instado a los residentes a permanecer en casa para evitar riesgos, aunque la demanda de servicios de comida a domicilio se ha disparado. Por su parte, algunos habitantes han decidido desafiar las condiciones climáticas con actividades al aire libre, haciendo honor al dicho “al mal tiempo, buena cara”.
La tormenta ha demostrado que, además de helar, el frío quema, y las comunidades afectadas luchan por mantenerse a salvo mientras esperan la llegada de mejores condiciones.