El comunicador Julio Martínez Pozo, abordó temas clave de la actualidad internacional, incluyendo una contundente crítica a la estrategia de Donald Trump con respecto a la migración. Según Martínez Pozo, el expresidente de Estados Unidos no utiliza las deportaciones exclusivamente como una política migratoria, sino como un instrumento propagandístico para consolidar su base política.

El comunicador explicó que, aunque Barack Obama ostenta el récord de deportaciones en la historia reciente de Estados Unidos, Trump le da un matiz distinto a estas acciones al transformarlas en espectáculos mediáticos diseñados para mostrar “mano dura” ante su electorado. Martínez Pozo afirmó:

“El éxito de Trump no reside en la cantidad de indocumentados que logra expulsar, sino en exhibir esas acciones como un logro para sus seguidores. Esto se convierte en un arma propagandística que refuerza su narrativa política.”

El sueño americano y la percepción pública

El analista subrayó que Trump manipula la percepción de los problemas económicos de la clase media estadounidense, responsabilizando injustamente a los inmigrantes. Martínez Pozo argumentó que la pérdida de empleos en Estados Unidos no es culpa de la migración, sino de la deslocalización de industrias hacia otros países, una realidad que Trump no aborda con la misma intensidad.

“El público no ve las fábricas que se trasladaron al extranjero, pero sí ve a los inmigrantes, y es ahí donde el discurso propagandístico se enfoca para culparlos por los problemas económicos.”

Desafíos económicos globales y China como actor clave

El análisis de Martínez Pozo no se limitó a Estados Unidos. También destacó la competencia entre China y Estados Unidos en el ámbito de la inteligencia artificial y el impacto de las economías especulativas. Según él, China no solo busca competir, sino establecer una cooperación estratégica para mantener la estabilidad global.

En este contexto, el comunicador señaló que la economía dominicana, con un crecimiento del 5% en 2024, se encuentra en una posición sólida para enfrentar los retos globales, aunque aún persisten desafíos como el déficit fiscal y la reestructuración de la industria eléctrica.