Un grave incidente ocurrió en la noche del martes en el Aeropuerto Internacional de Gimhae, en Busan, Corea del Sur, cuando un incendio se desató en un avión Airbus A321 de la aerolínea local Air Busan mientras se preparaba para despegar. El vuelo, con destino a Hong Kong, fue detenido de inmediato y los 176 ocupantes a bordo, incluyendo 169 pasajeros, seis auxiliares de vuelo y un ingeniero, fueron evacuados de forma urgente utilizando los toboganes de emergencia.
Las autoridades surcoreanas han confirmado que, afortunadamente, las lesiones fueron mínimas, con algunos pasajeros reportando heridas leves debido a la evacuación apresurada. Al menos dos personas fueron hospitalizadas con golpes menores, aunque su condición no es grave. El Ministerio de Tierra, Infraestructura y Transporte de Corea del Sur emitió un comunicado confirmando que la evacuación fue exitosa y que se encuentran en proceso de investigar las causas exactas del incendio.
El incidente ocurre justo cuando se cumplen varios meses del accidente aéreo ocurrido el 29 de diciembre, lo que ha generado una creciente preocupación entre los ciudadanos surcoreanos sobre la seguridad en los vuelos. Muchos pasajeros expresan su inquietud por volar en este momento, especialmente después de que se haya revelado que este incendio en el avión Airbus A321 ocurrió justo antes de su despegue, a las 10:30 p. m., cerca de la cola de la nave.
La situación ha sacudido la confianza en la seguridad aérea del país, que durante años ha sido reconocida por su fiabilidad. A pesar de los avances en la investigación, el incidente ha dejado a muchos viajeros nerviosos y preocupados por futuros vuelos, lo que podría afectar el sector aéreo surcoreano durante los próximos meses. Las autoridades continúan trabajando para esclarecer las causas del incendio y tomar medidas que garanticen la seguridad de los pasajeros en el futuro cercano.