Don Brígido, un residente del Condado de Los Ángeles, ha vivido una constante lucha para cubrir los gastos médicos derivados de los padecimientos de su esposa. A pesar de su esfuerzo por trabajar cada mes, las deudas por servicios médicos no dejan de acumularse, y con trabajos irregulares, la situación parece empeorar. “A veces andamos bien apurados para pagar el hospital”, comenta Brígido, quien, como muchos, se enfrenta a una carga financiera abrumadora.
Sin embargo, este escenario podría cambiar para él y miles de familias en el área. Las autoridades locales han anunciado el lanzamiento de un innovador Programa de Alivio de la Deuda Médica, diseñado para eliminar deudas médicas de residentes de bajos ingresos en el Condado de Los Ángeles. El programa, que comenzará con la eliminación de 500 millones de dólares en deuda, será posible gracias a una inversión de 5 millones de dólares aprobada por la Junta de Supervisores del Condado.
La doctora Bárbara Ferrer, directora de Salud Pública del Condado de Los Ángeles, destacó que muchas personas pasan años de sus vidas trabajando arduamente sin poder saldar las deudas contraídas por la atención médica. “Esta deuda está aplastando a nuestras comunidades más vulnerables”, afirmó Ferrer. Los funcionarios informaron que aproximadamente uno de cada diez adultos en el condado enfrenta graves dificultades debido a las deudas médicas, lo que ha generado una crisis de salud financiera.
El programa abarcará a todos los hospitales del Condado de Los Ángeles, eliminando las deudas de los pacientes que califiquen sin necesidad de presentar solicitudes. Los residentes seleccionados recibirán una carta de los hospitales notificándoles que su deuda ha sido eliminada. Esta acción, apoyada por una coalición de deuda médica, busca aliviar la presión financiera de las familias más necesitadas, proporcionando un respiro a quienes se han visto atrapados en un ciclo interminable de pagos hospitalarios.
“Este es un paso importante para garantizar que todos, independientemente de su situación económica, puedan acceder a los servicios de salud sin temor a ser ahogados por deudas impagables”, concluyó Ferrer.