A una semana de la instalación de un campamento de protesta frente al Congreso, sectores económicos y manifestantes han expresado su contundente rechazo a la propuesta de reforma fiscal del gobierno dominicano. Los participantes, liderados por el dirigente político y religioso Carlos Peña, han reafirmado su compromiso de no descansar hasta salvaguardar los derechos de los ciudadanos más necesitados.

Desde que se hizo pública la reforma, las críticas han aumentado, especialmente tras las vistas públicas en el Congreso, donde pocos se manifestaron a favor del proyecto. Peña subrayó que el grupo de manifestantes no representa ningún sector en particular y que su única intención es la retirada total de la reforma. “Esperamos que, al dirigirse a la nación el próximo domingo, el presidente retire completamente esta propuesta, que atenta contra la canasta familiar de los más pobres”, afirmó. Legisladores y empresarios también se han unido al repudio, sugiriendo que, en lugar de aumentar impuestos, se debería trabajar en consensos con los diversos sectores.

Este sábado, el movimiento Patria Libre ha convocado a una manifestación pacífica frente a la sede legislativa, intensificando así la presión sobre el gobierno.