Tras las fallas técnicas en los semáforos que causaron un caos vehicular en Santo Domingo, el director del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT), Milton Morrison, anunció la rescisión inmediata del contrato con la empresa Transcore Latam SRL, firmado en junio de 2023. Este contrato contemplaba la modernización y gestión del sistema de control de tráfico y la red semafórica del Gran Santo Domingo, pero ante las irregularidades detectadas, el INTRANT decidió terminar la relación contractual y proceder con las acciones legales correspondientes.
Morrison explicó que el INTRANT ha implementado medidas para fortalecer y mantener el control del sistema semafórico bajo la administración del Estado dominicano. Además, solicitó al Ministerio Público una investigación para determinar responsabilidades relacionadas con las irregularidades en la gestión del contrato con Transcore. El director señaló que la empresa había realizado cambios en los dispositivos semafóricos sin la debida autorización, lo que constituyó una violación a los acuerdos establecidos.
El 27 de agosto, Transcore Latam SRL cesó todos sus servicios al INTRANT, lo que resultó en un caos vial que afectó a 55 intersecciones en el Distrito Nacional. Ante esta situación, el INTRANT intervino directamente el sistema semafórico por primera vez desde la firma del contrato, lo que incluyó la militarización de nodos de comunicación críticos controlados por Transcore. La rápida respuesta del INTRANT evitó un colapso mayor y permitió retomar el control del sistema, aunque aún persisten desafíos técnicos.
Durante 48 horas, los técnicos del INTRANT trabajaron ininterrumpidamente para recuperar el control de la red semafórica, que había sido operada bajo una lógica centralizada por Transcore. Finalmente, lograron reestablecer el control manual del sistema, asegurando la independencia del INTRANT en la gestión de futuras averías. Aunque el sistema está nuevamente bajo control estatal, se reconocen las vulnerabilidades que aún deben ser atendidas.
Este incidente ha evidenciado la fragilidad de la infraestructura semafórica en Santo Domingo y la necesidad de un control más centralizado desde el INTRANT. Morrison reafirmó el compromiso de la administración con la transparencia y la rendición de cuentas, subrayando la responsabilidad de informar a la ciudadanía sobre cualquier situación que afecte los servicios esenciales del país.
