Esta mañana, Ryan Wesley Routh, el sospechoso de un intento de asesinato contra el expresidente Donald Trump, compareció ante una corte en West Palm Beach, Florida, para una audiencia crucial que determinará si podrá enfrentar su proceso judicial en libertad o permanecerá bajo custodia hasta el juicio.

El juez encargado de la audiencia revisará los argumentos presentados por los fiscales, quienes podrían sumar nuevos cargos a los ya existentes. Actualmente, Routh enfrenta acusaciones por posesión de un arma de fuego, siendo un delincuente previamente condenado y por posesión de un arma con el número de serie borrado, lo que agrava su situación legal.

Los abogados defensores de Routh han insistido en que su cliente no representa un peligro de fuga ni una amenaza para la comunidad, argumentando que debería ser liberado bajo fianza. No obstante, los fiscales sostienen que las circunstancias del caso ameritan su detención hasta que se lleve a cabo el juicio, especialmente dada la gravedad de las acusaciones.

La decisión del juez se espera en las próximas horas y podría influir significativamente en el curso del caso, que ha captado la atención mediática a nivel nacional debido a la naturaleza de los cargos y la prominencia de la supuesta víctima.