Más de 100 personas fueron detenidas anoche en Londres después de que se desataran protestas convocadas por grupos de extrema derecha, en respuesta a un acuchillamiento múltiple en un centro recreativo de Southport, en el noroeste de Inglaterra. El ataque, que dejó tres niñas muertas, ha generado una ola de disturbios en varias ciudades del país.
Las fuerzas del orden informaron que en el centro de la capital británica se registraron altercados entre manifestantes y policías, con algunos participantes gritando consignas como “Detened los barcos” y “Salvad a nuestros niños”, mientras arrojaban botellas y latas contra los agentes.
La Policía Metropolitana de Londres (MET) indicó que las detenciones se llevaron a cabo por actos violentos, agresión a un trabajador sanitario y por intentar romper el cordón policial en un intento de acceder al área del Parlamento. Además, varios agentes resultaron con heridas leves durante los enfrentamientos.
El martes por la noche, se produjeron desórdenes violentos en Southport al término de una vigilia en honor a las víctimas del ataque, lo que aumentó la tensión en la región.
Los disturbios no se limitaron a Londres. En otras ciudades inglesas, como Hartlepool, Manchester y Aldershot, también se reportaron incidentes violentos, donde los manifestantes arrojaron objetos a la policía, exacerbando la situación de seguridad en el país.
Las autoridades continúan en alerta máxima, y la MET ha reforzado su presencia en las calles para evitar nuevos brotes de violencia.